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La mayoría de los pacientes que han perdido una cantidad importante de peso son personas que sienten gran satisfacción por haber trasformado su vida, ya sea como resultado de una cirugía bariatrica (“bypass” gástrico, manga gástrica, banda gástrica o plicatura gástrica) o por un cambio en la dieta y la actividad física.
Sin embargo, luego de alcanzar un nuevo peso estable, no se sienten cómodos con su aspecto físico, por presentar gran flacidez y cantidades importantes de piel que cuelga en diversas partes de sus cuerpos como: cara, cuello, tórax, brazos, abdomen, espalda, glúteos, púbis y muslos.
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La obesidad queda en el pasado de sus vidas pero este nuevo problema les ocasiona grandes complejos e inconformidad tanto estética como funcional. Puede ser también que tenga dificultades para realizar actividad deportiva, para vestirse, para tener una vida sexual normal o para cuidar de su aseo personal.
Todos estos motivos son válidos para someterse a una cirugía plástica para mejorar la calidad de vida y completar el proceso que inicia al entrar en un programa de pérdida masiva de peso.
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